A) MESA, LUZ Y POSTURA
Puede parecer obvio, pero no lo es. Si queremos lograr buenos resultados en el trabajo sin maltratarnos físicamente es importante que nuestro lugar de trabajo esté correctamente ventilado e iluminado. En la medida en que nos encontremos cómodos y en una buena posición nuestro rendimiento será mejor; si por el contrario trabajamos en un lugar poco iluminado, sometidos a ruidos molestos o con una mala postura, eventualmente nuestro cuerpo nos pasará factura y esto puede ser bastante molesto y hasta peligroso para nuestra salud.
La idea principal es no acercarnos ni alejarnos demasiado del papel; sin una óptica clara y general de lo que estamos dibujando no podemos obtener lo deseado. Por lo tanto, dependiendo del tamaño del lienzo o del folio debemos situarnos en distancias diferentes.
Si nuestro dibujo no supera el tamaño de una hoja DINA-4 la distancia recomendada es la de codo-cabeza. Cuando la superficie a aumentando también lo hace la distancia.
Es a distancias relativamente grandes, como en murales, cuando la intuición y la experiencia del dibujante escogen la mejor longitud.
A la hora de dibujar, como se ha dicho hasta ahora, se ha de tener una visión generalizada de lo que estamos creando; la inclinación de la mesa ayuda a ello, a demás de proporcionar la libertad del movimiento del brazo necesaria.
Si dibujamos sobre una superficie completamente horizontal el brazo ha de realizar un esfuerzo complementario.
Cuando se extiende hacia la parte superior del papel el brazo ha de estirarse forzosamente, igualmente ocurre cuando nos acercamos el brazo hacia nosotros, que ha de replegarse.
Al inclinar el plano de la hoja alejamos la zona próxima a nosotros y acercamos la alejada, consiguiendo así un "equilibrio" favorable.
Esta inclinación también viene marcada por el tamaño de la figura: mayor tamaño-mayor inclinación, menor tamaño-menor inclinación.
En obras de tamaño grande es conveniente situar el lienzo en posición vertical para podernos mover con facilidad por todas las zonas.
Si nuestro dibujo no supera el tamaño de una hoja DINA-4 la distancia recomendada es la de codo-cabeza. Cuando la superficie a aumentando también lo hace la distancia.
Es a distancias relativamente grandes, como en murales, cuando la intuición y la experiencia del dibujante escogen la mejor longitud.
A la hora de dibujar, como se ha dicho hasta ahora, se ha de tener una visión generalizada de lo que estamos creando; la inclinación de la mesa ayuda a ello, a demás de proporcionar la libertad del movimiento del brazo necesaria.
Si dibujamos sobre una superficie completamente horizontal el brazo ha de realizar un esfuerzo complementario.
Cuando se extiende hacia la parte superior del papel el brazo ha de estirarse forzosamente, igualmente ocurre cuando nos acercamos el brazo hacia nosotros, que ha de replegarse.
Al inclinar el plano de la hoja alejamos la zona próxima a nosotros y acercamos la alejada, consiguiendo así un "equilibrio" favorable.
Esta inclinación también viene marcada por el tamaño de la figura: mayor tamaño-mayor inclinación, menor tamaño-menor inclinación.
En obras de tamaño grande es conveniente situar el lienzo en posición vertical para podernos mover con facilidad por todas las zonas.
Recomendaciones:
- Si somos diestros, la fuente de luz debe encontrarse a nuestra izquierda; si somos zurdos -por el contrario- la fuente de luz deberá ubicarse a nuestra derecha. De esta manera evitaremos interponer nuestra mano entre la luz y el papel, lo cual generaría sombras que dificultan nuestra visibilidad sobre el trabajo.
- Nada es mejor que la luz natural, pero en caso de vernos en la necesidad de trabajar en la noche (lo cual es muy frecuente en nuestra carrera), lo ideal es trabajar con luz blanca fluorescente.
- Las manos limpias y los instrumentos limpios nos ayudarán a mantener el trabajo prolijo.
- El soporte debe ser liso y plano. Para mejores resultados lo ideal es fijar el papel a la mesa por sus extremos con tirro; la cinta adhesiva suele maltratar el papel al despegarse.
- La manera ideal de trabajo es tener el soporte inclinado unos 30º o 45º, todo depende del tipo de dibujo que estemos realizando y de nuestra comodidad. Si el dibujo es grande, trabajar sobre un soporte horizontal puede resultarnos engorroso, incómodo y nos será más difícil mantenerlo limpio.
- Procura trabajar siempre en el mismo lugar y -en la medida que te sea posible- en el mismo horario. Esto contribuye a crear en ti hábitos de trabajo saludables, pero trata de que el tiempo que emplees sea razonable, no demasiado que te agotes mental y físicamente, ni tan poco que el tiempo de trabajo no te rinda. Puede ser muy positivo además que tomes unos minutitos para descansar por cada 45 minutos de trabajo, de esta forma refrescas tu mente y descansas tu cuerpo.
B) ASEO DE ÁREA DE TRABAJO E INSTRUMENTOS
Las normas de aseo en dibujo técnico, tienen como objetivo la obtención de trabajos exentos de suciedades.
Los elementos que pueden ocasionar dicha suciedad, pueden venir del ambiente de trabajo, del instrumental utilizado y del propio dibujante.
Sobre el medio ambiente, debe cuidarse la superficie de trabajo, manteniéndola limpia de polvo y restos de trabajos anteriores, como briznas de goma de borrar, manchas de tinta, anotaciones a lápiz realizadas sobre la misma, etc.. Durante la ejecución del dibujo deberá tenerse especial cuidado con las briznas de la goma de borrar, ya que estas contienen restos del grafito borrado, y son quizás las que producen las manchas más difíciles de limpiar.
Debe cuidarse el instrumental de dibujo, especialmente la escuadra, el cartabón y la regla, que son los instrumentos que, en mayor medida, estarán en contacto con la superficie del dibujo. El instrumental de dibujo, al ser manejado con las manos, se les adhiere la grasa propia de la piel humana, a la que a su vez se le adhiere el grafito dejado por el lápiz. Esta combinación de grasa y grafito, produce la mayor parte de la suciedad en los dibujos. Para evitarla, debe lavarse el instrumental con agua y jabón, con el objeto de eliminar la grasa y el grafito adherido a la misma. Respecto a los estilógrafos con depósito de tinta recargable, debe evitarse que la tinta se seque, y pueda obturar el flujo de tinta, para lo cual, si no van a ser utilizados en un largo periodo de tiempo deberán lavarse, solo con agua, con el objeto de eliminar todo reducto de tinta; posteriormente se secarán minuciosamente todos los componentes del instrumento, para evitar que los residuos de agua pudieran mezclarse, posteriormente, con la tinta, y ocasionar un mal funcionamiento del instrumento, al ser esta más fluida de lo necesario para el correcto funcionamiento de este.
Otra causa de suciedad debida al instrumental, es la producida por una goma de borrar impregnada de restos de grafito, que produce manchas muy difíciles de limpiar, al intentar borrar con ella. Se procurará mantener la goma de borrar limpia, frotándola sobre otra superficie ajena al dibujo, hasta eliminar los restos de grafito.
Respecto al propio dibujante, deberá mantener las mínimas normas de higiene personal, manteniendo en lo posible sus manos, libres de grasa, sudor y restos de grafito. Dado que la mano se apoya sobre el dibujo, suele mancharse de grafito, que mezclado con la grasa de la mano se convierte en una fuente de suciedad. Debe igualmente mantenerse las manos libres de sudor, ya que éste, humedecería la superficie del papel pudiendo producir corrimientos de los trazados realizados, y en determinadas superficies la ondulación de las mismas.
C) CORRECTO PEGADO DE PAPEL
Para fijar el papel sobre la mesa de dibujo se recomienda usar tirro, sobre todo si la mesa esta forrada con papel laminene; el tirro permitirá (si es de buena calidad) despegar Ia hoja con más facilidad y sin dejar huella la superficie de papel o del tablero.
La hoja se pega hacia el ángulo inferior izquierdo de Ia mesa de dibujo, lo más próximo a su borde izquierdo, y dejando suficiente espacio en el borde inferior para apoyar las manos y la Regla T.
Cortamos cuatro pedacitos de tirro, de longitud 2,0 aproximadamente, y los colocamos en el borde derecho de la mesa de dibujo, presionamos con los dedos de la mano izquierda, regla T y formato, pegamos en las esquinas superiores las cintas, de manera que queden perpendiculares a las esquinas, sin que la cinta llegue al margen de la lámina.
Con la regla T apoyada en el extremo izquierdo del tablero (para el caso de las personas diestras - las personas que utilizan la manso izquierda, colocarán la Regla T en el lado derecho de su tabla), hace coincidir el borde superior de esta con el superior del papel, y desplazando suavemente hacia abajo la regla T, colocas en las dos esquinas superiores, el elemento de fijación que poseas. Después vuelves a trasladar la regla T, procurando que el papel quede estirado y sin arrugas, y finalmente colocas el elemento de fijación en las dos esquinas restantes.
En dibujo técnico es tradicional pegar el papel para evitar que éste se mueva y lograr gráficos con precisión milimétrica. En el dibujo a mano alzada, que es el siguiente tema, no es tan necesaria la precisión pero sí es recomendable sujetarlo por varias razones:
- La primera es que al adherirlo a tu mesa de trabajo obligas a que tu mano haga movimientos en todas direcciones, favoreciendo el enriquecimiento de tus habilidades psicomotrices finas o lo que es lo mismo, te ayuda a mejorar tu capacidad de control de trazo.
- Otra razón consiste en que al estar pegado tu soporte de dibujo no maltratas las esquinas de tu dibujo por el movimiento o por los dobleces involuntarios que podrías hacer con tus codos y antebrazos.
- También, al mantener fija el área de dibujo tu cerebro es forzado a resolver el movimiento a través de resoluciones alternativas lo que afecta muy positivamente en tus decisiones creativas. Es de suma importancia también que no cedas a la tentación de mover la silla o moverte tú para dibujar. Perdería todo su significado la fijación del papel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.